Cadenas de suministro respetuosas con el medio ambiente
¿De qué depende?
La sostenibilidad es un tema muy importante y muy amplio en el sector de la logística. Abarca desde el uso de materiales respetuosos con el medio ambiente hasta el control de los proveedores pasando por las rutas de transporte económicas. Es por tanto evidente que resulta fundamental planificar al detalle un concepto global para el cuidado del medio ambiente.
A continuación descubrirás qué materiales son adecuados para los embalajes, cómo con determinados productos puedes cuidar el medio ambiente de forma sostenible y qué tienes que tener en cuenta para minimizar la contaminación de nuestro planeta durante el envío de mercancías.
¿Cuánto tiempo tarda en descomponerse cada material?
Para que te hagas una idea del tiempo que tardan en descomponerse los distintos materiales, te presentamos cuáles son los que más se utilizan en el ámbito de la logística:
Papel
El papel es biodegradable. Sin embargo, los materiales de recubrimiento que se usan en muchos embalajes de papel, como barnices, plásticos y pegamentos, plantean problemas y se descomponen con dificultad, lo cual hace que la degradación se alargue. Las bolsas de papel por ejemplo tardan unas seis semanas.
Metales
Los metales no son materiales orgánicos y por lo tanto no pueden descomponerse. Los embalajes contienen a menudo aluminio, que tarda entre 80 y 200 años en degradarse. Sin embargo, este es un material que presenta excelentes propiedades para su reciclaje: puede reutilizarse prácticamente sin que su calidad varíe.
Plásticos
La mayoría de los plásticos no son biodegradables. Las láminas de plástico que no se eliminan correctamente pueden tardar entre 20 y 100 años en degradarse. Y si son gruesas, incluso 500 años.
Soluciones de embalaje ecológicas
El desarrollo de innovadoras alternativas de embalaje permite ahora cuidar del medio ambiente de una forma mucho más sencilla. Los siguientes ejemplos demuestran que utilizando materiales reciclables pueden obtenerse mejores resultados:
Bolsas de basura 100 % reciclables. El método de fabricación con carbono e hidrógeno hace que el polietileno tenga un comportamiento totalmente inocuo para las aguas subterráneas y no libere gases ni sustancias nocivas.
Bolsas de plástico biodegradables hechas de fécula de maíz y polímeros sintéticos. Son totalmente biodegradables y gracias a su resistencia al agua y a su olor neutro son idóneas para residuos compostables.
Bolsas de papel. Especialmente adecuadas para residuos pesados y angulosos. Estas bolsas se descomponen sin dejar restos y están fabricadas en un resistente papel de embalar 100 % reciclable.
Unos pocos gestos para una protección activa del medio ambiente
El sistema global de buenas prácticas New Plastics Economy contribuye a reducir los residuos plásticos. Con este sistema no se genera basura a partir de plásticos. Al contrario: la idea es crear un ciclo en el que el plástico pueda reutilizarse constantemente. Para ello se aplican tres principios básicos:
- Elimina todos los productos plásticos innecesarios.
- Identifica los productos plásticos que son necesarios y asegúrate de que son reutilizables y reciclables.
- Reducir → Reutilizar → Reciclar
La tendencia actual es reducir los plásticos en todo el mundo. La Unión Europea tomó conciencia del grave problema existente y comenzó aprobando una normativa para la prohibición de diversos contenedores plásticos desechables que entró en vigor en 2021.
Sellos y certificados
Además de sellos para productos como el BIO, la industria del embalaje ha implementado sellos propios que observan las directrices de sostenibilidad y que están especialmente pensados para proveedores. Un ejemplo de ello es la certificación FSC.
Los objetivos de la certificación FSC son mostrar claridad e implementar procesos uniformes y sobre todo mensurables para mejorar la sostenibilidad. FSC son las siglas del término en inglés Forest Stewardship Council (gestión forestal responsable) y gracias al reconocimiento internacional del sello permite acreditar que a la hora de obtener las materias primas se tienen en cuenta a un alto nivel aspectos sociales y medioambientales.
En los supermercados alemanes, el sello FSC es ya la norma, pero cada vez son más los consumidores que también buscan el certificado FSC para el envío de mercancías. La Asociación alemana de Gestión Forestal Responsable demuestra que el sello FSC goza de una gran reputación en Alemania. El 79 % de los consumidores buscan el certificado de manera activa a la hora de comprar productos.
Elección de proveedores respetuosos con el medio ambiente
Para elegir de forma responsable proveedores sostenibles deben cumplirse los siguientes criterios:
- Utilización de materias primas y métodos de producción inofensivos para el medio ambiente
- Oferta de productos con sellos ecológicos reconocidos
- Información sobre productos alternativos menos perjudiciales para el medio ambiente
- Minimización de las rutas de transporte
- Reducción del uso de embalajes por parte de los proveedores
- Información sobre las consecuencias medioambientales de los productos y las condiciones de producción
- Salarios justos para proveedores y empleados
- Eliminación ecológica de los productos
¿Qué factores son decisivos para que la cadena de suministro sea sostenible y respetuosa con el medio ambiente?
Para conseguir que tu cadena de suministro tenga una estructura global respetuosa con el medio ambiente no solo hay que utilizar materiales ecológicos sino también tener en cuenta otros factores como el pago de salarios justos y el control de las normas. Nosotros hemos recopilado para ti los factores más importantes que te permitirán desarrollar una estrategia sostenible para tu empresa:
- Control de las condiciones acordadas para la protección del medio ambiente
- Control de sellos y certificaciones
- Minimización de emisiones de CO2
- Rutas de transporte mínimas
- Modernización de instalaciones obsoletas
- Uso de energías renovables
- Gestión de residuos transparente
- Seguridad en el trabajo
- Salarios justos para proveedores y empleados
Otro aspecto de la protección del medio ambiente es el correcto transporte de las sustancias peligrosas. En especial en el mercado de las baterías, creciente a nivel mundial, debe prestarse atención al correcto almacenamiento temporal para que ningún líquido llegue a las aguas subterráneas.
Un ejemplo de transparencia en el control de la cadena de suministro es el de DHL. Este gigante alemán de la logística permite a los consumidores hacer un seguimiento de las emisiones de CO2 a través de lo que se denomina un “panel de carbono” o “carbon dashboard”. Haciendo un “escaneo rápido” pueden ver valores, controlar su envío y al mismo tiempo hacer una comparación con valores orientativos del sector. El objetivo es reducir las emisiones a cero hasta el año 2050.
Para acertar en la elección de tus socios de logística y empaquetado deberías analizar a fondo tus opciones y evaluarlos según los criterios descritos. La cuestión principal es hasta qué punto se preocupa la empresa o el proveedor por el tema del medio ambiente y qué medidas adopta para minimizar los residuos y las emisiones de CO2.
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