Alto nivel de higiene:
La limpieza de los suelos de forma fácil.
En tiempos del SARS-CoV-2, nuestras manos y pomos deberían estar más limpios que nunca. Desinfectamos, mantenemos la distancia y aumentamos nuestras rutinas de limpieza. Al fin y al cabo, la higiene es lo más importante para evitar la propagación de enfermedades.
El suelo, que suele ser la superficie más grande de la habitación, tiende a recibir un tratamiento secundario en lo que respecta a la limpieza. Equivocadamente. Al fin y al cabo, el suelo entra en contacto con el calzado de calle durante la jornada laboral y, por efecto de la gravedad, casi todas las partículas de suciedad acaban también tarde o temprano en el laminado, la moqueta o las baldosas.
Esto hace que el suelo sea un punto de recogida de gérmenes y suciedad, sobre todo en oficinas, talleres y almacenes donde se mueven muchas personas cada día. Por lo tanto, a la hora de limpiar, no hay que olvidarse del suelo en ningún caso. Nuestros consejos te muestran cómo hacerlo.
Tomado bajo la lupa: lo que hay en los suelos españoles.
¿Comer del suelo? Mejor no. Por muy bien que se limpie una habitación, la suciedad no puede evitarse. Pero, ¿qué es lo que realmente se acumula allí a lo largo del día?
- Los virus Corona se propagan por gotitas. Si una persona afectada estornuda o tose, el virus cae sobre otra persona o sobre el suelo en un radio de dos metros. La buena noticia es que allí no puede multiplicarse debido a la falta de humedad.
- ¿Te quitas los zapatos en la oficina? Probablemente no. Las suelas de los zapatos de calle son las portadoras ideales de los huéspedes no invitados. Los agentes patógenos, como la bacteria E. coli, se adhieren especialmente bien a los perfiles de goma y se transfieren al suelo de la oficina cuando se camina. A partir de ahí, las bacterias se extienden a las personas, por ejemplo, a través de las bolsas que se han depositado en el suelo, y pueden así causar infecciones.
- La oficina es un lugar muy movido, al menos ocho horas al día. Hay muchas conversaciones, discusiones acaloradas y algún que otro bocadillo. Por eso hay muchos rastros de la vida cotidiana y de microorganismos no infecciosos en el suelo: por ejemplo, piedrecitas, migas o pelos.
- Además de las personas, nuestros equipos de trabajo también contribuyen a la contaminación. Las máquinas de fabricación producen partículas grandes o diminutas mediante procesos de trabajo y abrasión. Los ordenadores y las estaciones de impresión producen el conocido polvo fino, que se encuentra tanto en el aire como en el suelo.
Plan de limpieza para conseguir suelos higiénicos y limpios.
Las medidas de higiene solo funcionan si se llevan a cabo correctamente. Esto es especialmente cierto si no solo buscas un resultado visualmente atractivo, sino que también quieres romper las cadenas de infección. No hay dos revestimientos de suelo iguales. Más bien, cada tipo de suelo requiere una limpieza y unos cuidados especiales.
- Protégete: para todos los trabajos de limpieza en húmedo, deberías utilizar guantes que eviten que tus manos entren en contacto con el líquido de limpieza. Estos guantes deben estar y permanecer secos por dentro.
- Utiliza el aspirador correctamente: cuando aspires fuentes de peligro como productos químicos, polvo de madera o disolventes, asegúrate de elegir un aspirador industrial adecuado y sigue las instrucciones de uso.
- Utiliza correctamente el limpiador a alta presión: para una limpieza eficaz a alta presión, ajusta correctamente las variables mecánicas, térmicas y químicas.
Moqueta: cómo limpiarla correctamente
Los revestimientos textiles de los suelos requieren un poco de cuidado a la hora de limpiarlos, pero ganan puntos por su buena fijación del polvo y su mejor acústica.
- Utiliza una aspiradora en seco para la limpieza básica diaria de las moquetas; para las de pelo alto, utiliza el ajuste sin cepillos
- Antes de la limpieza intensiva, peina los pelos medianos y altos en su dirección natural y trata previamente las manchas
- Para limpiar a fondo las moquetas se deben usar champús especiales para moqueta, ya sea en forma de polvo seco o de espuma con agua
- Para la limpieza en húmedo, primero se rocía la espuma y se trabaja con un cepillo. Tras el secado completo, se vuelve a utilizar el aspirador
Consejo extra: una aspiradora de lavado elimina las molestas manchas sin demasiado esfuerzo y deja poca humedad residual. Ideal para los suelos de las oficinas que se van a volver a utilizar inmediatamente.
Laminado: cómo limpiarlo correctamente
Parece madera, pero es más barato y fácil de cuidar: no es de extrañar que el laminado sea tan popular en las salas de trabajo. La única desventaja: el lijado es imposible.
- Es útil pasar la aspiradora en primer lugar
- El laminado debe limpiarse a diario con un poco de agua y productos de limpieza suaves. Se recomienda secarlo después. Asegúrate de que no se formen charcos
- Elimina los pequeños arañazos con aceite y la abrasión del calzado con una goma de borrar
- No utilices nunca estropajos, abrillantadores o pulidores, ya que dejarán manchas antiestéticas en el laminado
A tener en cuenta: el laminado necesita muy poco producto de limpieza, un exceso dejará una antiestética película de grasa.
Limpieza del parqué: cómo funciona
La madera auténtica bajo los pies hace que las habitaciones resulten acogedoras. Sin embargo, las sillas de oficina pueden dejar surcos en este suelo blando. Por lo tanto, protege tu parqué con una estera de protección para el suelo.
- Limpia el parqué diariamente para eliminar la arena y las piedras pequeñas antes de que dejen marcas de abrasión
- A la hora de limpiar y cuidar el suelo, debes distinguir entre suelos de madera aceitados y naturales. Trata el primero exclusivamente con un limpiador especial
- Lo ideal es limpiar el parqué en seco o en ligeramente humedecido con una mopa de algodón escurrida
- El agua estancada daña el parqué y debe evitarse
- El pulido regular mantiene el brillo y sella la madera
Atención: las aspiradoras y los paños de microfibra son bastante inadecuados para el parqué, pues ¡pueden dejar arañazos!
Limpieza de azulejos: lo que hay que tener en cuenta
Las baldosas del suelo dan a las habitaciones un aspecto elegante. También demuestran lo fáciles que son de cuidar cuando se trata de la limpieza diaria.
- En primer lugar, elimina el polvo y las pelusas con un aspirador o un limpiador en seco
- A continuación, utiliza un producto de limpieza neutro y una mopa para la limpieza en húmedo; las baldosas toleran el agua sin problemas
- Para las juntas oscurecidas debes utilizar un limpiador de juntas especial
- Para las baldosas muy sucias puedes utilizar un limpiador de alta presión
Mejor no: no utilices productos de limpieza con sustancias nutrientes o de tratamiento. Estos forman una capa pegajosa y a veces resbaladiza sobre las baldosas.
Suelos de PVC: cómo limpiarlos correctamente
¿Buscas un revestimiento robusto para el suelo? Entonces el PVC es la opción adecuada para ti. La técnica correcta de limpieza conserva su brillo.
- El PVC tolera el aspirado y el fregado sin problemas. Se obtienen buenos resultados con una mezcla 1:1 de agua y vinagre
- Para que el suelo no se vuelva opaco, enjuágalo siempre después con agua clara
- Seca después el suelo con un paño suave
- Puedes eliminar las pequeñas marcas con sprays especiales o borradores de suciedad
Atención: la superficie blanda del PVC sufre con los agentes de limpieza agresivos o abrasivos.
La limpieza regular y profesional de los suelos prolonga su vida útil, protege contra los riesgos para la salud y aumenta el bienestar. Encontrarás productos adecuados para ello en nuestra tienda de higiene.
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